"Lo que es más descorazonador con los humanos, es que ellos
aceptan la idea de llevar una vida limitada. Ser débil, estar
enfermo, sentirse desgraciado, para ellos es normal, no imaginan
que la vida pueda ser diferente. Por supuesto, nadie puede
escapar totalmente a ciertas limitaciones que nos impone la
naturaleza, pero podemos reducirlas, no estamos obligados a ser
siempre prisioneros o víctimas. No solamente es posible
prolongar los buenos estados, las buenas condiciones, sino que
también es posible retrasar la aparición de estados negativos;
para ello sólo basta creer que es posible.
Desgraciadamente, cuando se observa a los humanos, se ve que se
comportan como si estuvieran hipnotizados, como si se hubiera
trazado una línea ante ellos diciéndoles: «¡No iréis más
lejos!» y se lo creen, aceptan esta limitación como una
fatalidad. Pues no, no es una fatalidad. Pero ellos no se
conocen, no tienen conciencia de todos los recursos, de todos los
poderes que el Creador ha puesto en ellos, y permanecen ahí
chapoteando.
Entonces, a partir de ahora, esforzaros en rechazar
vuestros límites, y sentiréis, percibiréis que podéis hacer
mucho más de lo que os imagináis. "
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Nuestro deber es construir un mundo mejor, ¿Que clase de hombre es aquel que no quiera cambiar el mundo por uno mejor? Nuestra pequeñez en el vasto universo no debe limitarnos para mejorarlo. Para alcanzar lo posible, hay que intentar lo imposible. Creo firmemente que para cambiar al mundo hay que empezar por nosotros mismos. Labrar en nosotros mismos la mejor persona en que nos podamos convertir. ¡Al cambiar nosotros, el mundo cambia!