'No hables demasiado bien de alguien que apenas se
conoce a sí mismo transfigurado en su resplandor
rosado; di amablemente de él lo que es, sobre todo,
cierto, recordando siempre que te pertenece;
tratalo como faltista, si así lo quieres, pero reivindicalo,
conservalo, llamalo hermano todavía'
Oliver Wendell Holmes
La Fundación Mispah desarrolló la terapia preventiva y correctiva de conductas adictivas, denominada Taller de Autoconocimiento Profundo (TAP), diseñada como un programa de vida para el desarrollo humano y bienestar integral. En su origen, el Programa fué conceptualizado como un enfoque humanista que descansa en la idea de que el participante realice un exámen muy objetivo, honesto y serio acerca de si mismo.
La cultura y pensamiento griegos desde sus inicios reconocían ésta importante tarea del hombre al inscribir en el gran Templo de Delfos la frase “nosce te ipsum”
De nuestro conocimiento propio depende la posibilidad de cuidarnos –cuerpo, mente, alma--, de cultivarnos y gestionar nuestro mejoramiento. El gran filósofo griego Socrates fué un poco más allá, al afirmar y dejar como legado moderno su famosa frase
¡Beneficios Esperados de los Talleres TAP!
¿Qué cambios se esperan en las personas que hayan realizado a conciencia, a fondo, decididamente, ese inventario moral de sus defectos de carácter individual que inconcientemente los ata y limita a vivir en libertad y plenitud y los hace propensos a hábitos indeseables?
Entre una variedad y riqueza de hallazgos que una persona puede encontrar de esta experiencia de dejarse (permitirse) conducir para realizar un minucioso exámen de si misma, están los siguientes (adaptado de Carlos Devis y con base a las vivencias de muchos años del instructor coordinador de este esfuerzo, Carlos Aguirre V, Presidente de la Fundación Mispah A.C.):
1. Tendencia a dejarse llevar por la intuición y por lo que verdaderamente se quiere, en vez de actuar motivado por la presión de los miedos del pasado, o por ideas limitantes acerca de sí mismo (por lo general erróneas).
2. Total desinterés en juzgar a otros o juzgarse a sí mismo de cualquier manera que genere conflicto o separación.
3. Total incapacidad para preocuparse sin razón (este es un dsíntoma muy generalizado que nos hace preocuparnos doblemente, y por lo regular por motivos inexistentes o magnificados).
4. Completa aceptación de los demás, renuncia definitiva a tratar de cambiar a otros, y no culpar a otros por nuestras actuaciones o decisiones propias.
5. Un deseo intenso de cambiar personalmente, en miras a mejorar cada día en todos los sentidos.
6. Ataques, repetidos y totalmente sorpresivos, de risa, combinados con una extraña y permanente sensación de gratitud y armonía para con todos los que nos rodean.
7. Incontrolable tendencia a sentirse de nuevo como un niño, juguetón, abierto y sencillo.
8. Tendencia a ser soñador, a ilusionarse sin razón y con entusiasmo.
9. Pérdida repentina de la arrogancia y mala memoria en el sector cerebral en el que los resentimientos y el dolor son almacenados.
¿Qué características encontramos normalmente en las personas que les impide vivir en uso pleno de sus capacidades, que domina sus pensamientos y los obliga a vivir asustados, bajo un sentimiento perpetuo de crisis, de conflicto o conformismo?
Las situaciones de vida en las que las personas esclavas de muy diversas adicciones --drogas legales e ilegales, al sufrimiento, al juego, a la comida, al consumo, al sexo, bulimia, anorexia, consumismo y otras-- se sienten dentro de un pozo, negro y cada vez más profundo, son reversibles. Es posible recobrar plenamente el estado de sobriedad emocional y liberarse de las ataduras del vicio. Es posible reincorporarse a la familia y sociedad. Como lo señalaba Oliver Wendell Holmes, 'Una mente ampliada por una nueva idea, jamás vuelve a su tamaño original'.
Entre las conductas negativas o menos deseables de las personas inmersas en hábitos adictivos, encontramos las siguientes:
- Tendencia a leer, escuchar y ver noticias sensacionalistas
- Ver televisión todo el día, especialmente los noticieros alarmistas y amarillistas de noticias
- Hablar constantemente de las cosas terribles que van a pasar y exageralas
- No pensar en invertir para el futuro, para tu retiro, para una vejez comoda y agradable; ni pensar en nada que pueda significar progreso; al contrario, pensar que el mundo se va a acabar mañana
- Concentrase en los problemas, en lo desagradable, en lasenfermedades, epidemias virales y en la muerte; convértirte en un especialista en el dolor, en hacerse la víctima, el sufrido, rechazado o no reconocido
- No permitir que el estado de salud se libre de flagelos tales como dolores de espalda, problemas digestivos, dolores de cabeza, alta o baja tensión y un alto nivel de azúcar en la sangre
- Quejarse todo el tiempo y no reconocer nada positivo, verlo todo oscuro
- Leer solo libros negativos, alarmistas, revistas de chismes, y evitar juntarse con personas positivas
Pasan por un proceso en el que se abre un nuevo sentimiento de aceptación y derrota. Esto significa, eliminar la nociva soberbia que les asfixiaba para poder aceptarse como son; pero al mismo tiempo ser capaces de vencerse a si mismos, al cambiar sus hábitos negativos y defectos de carácter.
Las personas así transformadas llevan consigo y usan permanentemente un potente escudo de positivismo que los blinda ante cualquier circunstancia, sin dejar por ello de reconocer que son seres humanos tan solo limitados por sus propios pensamientos.
Ahora viven para mantenerse en un estado o condición altamente saludable, pleno, renovador, productivo y positivo, en los planos mental, físico, emocional y espiritual.