"Trabajad, esforzaros. No os imaginéis que reservándoos,
conservéis mejor la salud, más bien al contrario. La vida, en
las personas inactivas, disminuye por sí misma. Sembrad semillas
viejas: no germinarán ya que la vida se les ha escapado.
También vosotros tenéis semillas, y de todas clases.
Sembradlas, si no perderán todas sus virtudes. ¿Qué son estas
semillas? Los conocimientos que amontonáis en vuestro granero,
vuestra cabeza, y que dejáis enmohecer o secar en la
inmovilidad, la inactividad, la inutilidad.
Acumular saber, está bien, pero a condición de sembrarlo, es
decir, de ponerlo en práctica para hacerlo crecer y fructificar.
Y sólo se le hace crecer y fructificar poniéndolo a prueba en
la vida. No hay ningún otro medio para avanzar, crecer,
reforzarse.
Los que huyen de las dificultades para evitar las
fatigas, encontrarán otras dificultades todavía mayores, y
sufrirán, ya que es su propia vida la que dejan escapar. "
Omraam Mikhaël Aïvanhov
Nuestro deber es construir un mundo mejor, ¿Que clase de hombre es aquel que no quiera cambiar el mundo por uno mejor? Nuestra pequeñez en el vasto universo no debe limitarnos para mejorarlo. Para alcanzar lo posible, hay que intentar lo imposible. Creo firmemente que para cambiar al mundo hay que empezar por nosotros mismos. Labrar en nosotros mismos la mejor persona en que nos podamos convertir. ¡Al cambiar nosotros, el mundo cambia!