"...insalvable declaración del Secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, quien afirmó:
“por fortuna” terminó la “ideologización extrema” por la que había un divorcio entre universidad y empresa, debido a que en el pasado el mundo intelectual y universitario mexicano se opuso a dichas relaciones al pensar que las compañías son “agentes del capitalismo”.
Acaso no se podría afirmar exactamente lo contrario:
“por fortuna” terminó la “ideologización extrema” por la que había un divorcio entre universidad y empresa, debido a que en el pasado el mundo industrial y empresarial mexicano se opuso a dichas relaciones al pensar que las universidades son “agentes del comunismo”.
Bien haría el secretario Lujambio en aceptar la recomendación que ese mismo día hiciera el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, a jóvenes universitarios:
“A mí me aconsejaron poner cara de idiota antes que decir
una idiotez”.
Pulso de la Semana
Semanario LAISUM, Año 1, Núm. 5, 2011
Laboratorio deAnálisis Institucional
del Sistema Universitario Mexicano
laisum@desinuam.org
“por fortuna” terminó la “ideologización extrema” por la que había un divorcio entre universidad y empresa, debido a que en el pasado el mundo intelectual y universitario mexicano se opuso a dichas relaciones al pensar que las compañías son “agentes del capitalismo”.
Acaso no se podría afirmar exactamente lo contrario:
“por fortuna” terminó la “ideologización extrema” por la que había un divorcio entre universidad y empresa, debido a que en el pasado el mundo industrial y empresarial mexicano se opuso a dichas relaciones al pensar que las universidades son “agentes del comunismo”.
Bien haría el secretario Lujambio en aceptar la recomendación que ese mismo día hiciera el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, a jóvenes universitarios:
“A mí me aconsejaron poner cara de idiota antes que decir
una idiotez”.
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