Existen sobradas evidencias y manifestaciones de la sociedad mexicana, para que Calderòn acepte y reconozca que inició una estrategia fallida; de otro modo a su discurso sobre el tema se le aplicará el artIculo sexto, esto ess, seirá directo al cesto de la basura.
Ante propios y extraños, se magnificará su incongruencia entre lo que hace y lo que dice; entre lo que predica y lo que practica. Su guerra contra el narco se está convirtiendo en su principal talón de aquiles! Acabara siendo la victima de sus magros logros anteriores. Nos pide anteponer patria a partido, y hace todo lo contrario; nos intenta convencer que tiene la razòn, la ley y la fuerza de su parte, y solo vemos obsesión, imprudencia y prepotencia; se atrevió a lanzarnos desde Torreón un llamado desesperado de 'ya basta a la delincuencia', cuando es lo que la propia voz ciudadana le ha solicitado por todos lados.
Acabar con el narcotrafico no es tara fácil, pero menos será con medidas unilaterales, como la entrada del ejercito y la marina al escenario de combate en ciudades y el campo, que ha propiciado mayor violencia y la muerte casi a diario de gente inocente. La gente ahora percibe mayor inseguridad, temor e incertidumbre.
No le estamos pidiendo que se desentienda y abandone la lucha contra el crimen organizado; le estamos exigiendo que cambie de táctica, que impulse una estrategia mas inteligente, que enfrente el problema desde todos los ángulos: empleo, educación, cultura, adicción, corrupción...
No es mucho pedir, pero todo hace suponer que el Presidente está más interesado en posicionar a sus candidatos en las contiendas electorales locales de 2011 y para la sucesión presidencial del 2012.
Presidente Calderón: Use la empatía y pongase en los zapatos de la sociedad que siente y resiente todos las consecuencias de su guerra.
¡La humildad no consiste en pensar menos de uno; sino en pensar menos en uno!
Ante propios y extraños, se magnificará su incongruencia entre lo que hace y lo que dice; entre lo que predica y lo que practica. Su guerra contra el narco se está convirtiendo en su principal talón de aquiles! Acabara siendo la victima de sus magros logros anteriores. Nos pide anteponer patria a partido, y hace todo lo contrario; nos intenta convencer que tiene la razòn, la ley y la fuerza de su parte, y solo vemos obsesión, imprudencia y prepotencia; se atrevió a lanzarnos desde Torreón un llamado desesperado de 'ya basta a la delincuencia', cuando es lo que la propia voz ciudadana le ha solicitado por todos lados.
Acabar con el narcotrafico no es tara fácil, pero menos será con medidas unilaterales, como la entrada del ejercito y la marina al escenario de combate en ciudades y el campo, que ha propiciado mayor violencia y la muerte casi a diario de gente inocente. La gente ahora percibe mayor inseguridad, temor e incertidumbre.
No le estamos pidiendo que se desentienda y abandone la lucha contra el crimen organizado; le estamos exigiendo que cambie de táctica, que impulse una estrategia mas inteligente, que enfrente el problema desde todos los ángulos: empleo, educación, cultura, adicción, corrupción...
No es mucho pedir, pero todo hace suponer que el Presidente está más interesado en posicionar a sus candidatos en las contiendas electorales locales de 2011 y para la sucesión presidencial del 2012.
Presidente Calderón: Use la empatía y pongase en los zapatos de la sociedad que siente y resiente todos las consecuencias de su guerra.
¡La humildad no consiste en pensar menos de uno; sino en pensar menos en uno!